El sorprendente contraste de la Ciudad de México por Oscar Ruíz
En un esfuerzo por llamar la atención sobre el programa de desarrollo comunitario en áreas de bajos ingresos, el banco mexicano Banamex lanzó una campaña publicitaria titulada Borrar la diferencia (“Erase the Difference”), para lo cual contrató al fotógrafo Oscar Ruíz y le pidió que capturara la brecha muy aguda y sorprendente entre los pobres y los ricos que existe en la Ciudad de México. El fotógrafo, que también es piloto de helicóptero, tomó dos viajes por la ciudad y las imágenes que tomó son inequívocas.
La campaña, que presenta cuatro imágenes, destaca opulentos departamentos y villas ubicadas justo al lado de casas modestas y a veces muy ruinosas pertenecientes a la franja más pobre de la gigantesca Ciudad de México. En un lado hay casas residenciales blancas con techos de tejas y césped verde bien cuidado, y en el otro hay un grupo de edificios viejos, grises y lúgubres. A veces, sólo una pared delgada y alta separa los dos “mundos”. Sin embargo, la vida es muy diferente en cada lado.
Las fotos parecen retocadas con Photoshop, como si dos imágenes separadas se hubieran pegado juntas para lograr un efecto dramático, pero no es así. De hecho, el lema dice: “Esta imagen no ha sido modificada. Es hora de cambiar eso. “
“Casi el 46% de la población de México vive en la pobreza, y el país tiene una de las tasas más altas de desigualdad de ingresos en el mundo”, escribe FastCoExist. En la Ciudad de México, los más pobres de la megalópolis de 20 millones de personas no tienen plomería y sus hogares están sujetos a inundaciones por las aguas residuales. Aunque pretende servir como publicidad para un programa de desarrollo del banco, la campaña sirve más como mala publicidad de servicio público.